Torrijas artesanas.
Torrijas artesanas, elaboradas en pastelería con los mejores ingredientes.
SOLO DISPONIBLE EN TEMPORADA.
VENTA POR UNIDAD
Delicado bizcocho humedecido en jarabe, enrollado sobre sí mismo, relleno de crema y canela, con una pequeña “cúpula”, de crema azucarada y tostada, como representación del solideo papal.
CAJA DE 12 UNIDADES.
Ceferino, muy devoto de la Virgen, quería rendir un homenaje al Papa que en 1854 había proclamado el dogma de la Inmaculada Concepción de María. Éste no era otro que Pío IX (Pío Nono); el último Papa Rey, el Papa bajo cuyo pontificado los Estados Potificios pasaron a formar parte de la nueva Italia que surgía con la reunificación, quedando dichos estados reducidos a la mínima expresión: la actual Ciudad del Vaticano. En este contexto Ceferino madura su idea de “crear” un nuevo pastel que no sólo lleve el nombre del Papa (de ahí surge el nombre de pionono), sino que además el pastel recuerde la figura papal: aspecto cilíndrico y algo rechoncho (bizcocho humedecido enrollado sobre sí mismo), revestido como el Papa con un balandrán blanco (canastilla de papel en cuyo interior se deposita el bizcocho humedecido), y coronilla de crema azucarada y tostada sobrepuesta al cilindro de bizcocho, que quiere simbolizar el solideo con el que el Papa cubre su coronilla. Ceferino Isla, era descendiente de la familia Isla, oriundos de Rincón de Isla, en la provincia de Cantabria, algunos de cuyos miembros bajaron durante la Reconquista a liberar Sevilla, estableciéndose allí. El origen de la llegada de la familia Isla a Santa Fe se recoge en la obra "Historia incompleta de 900 años de la Familia Carrillo" La devoción de Ceferino Isla dio lugar a la creación del dulce más famoso y reclamado de la provincia de Granada, el pionono de Santa Fe. Hoy se sigue elaborando en su obrador de forma artesanal, con materias primas de primera calidad, tal y como se hacía en sus inicios.