


Los jefes de cocina profesionales y expertos en productos lácteos saben que no todas las natas se fabrican de la misma manera. Es por ello que la Nata Fresca de Priégola se elabora de manera tradicional, pasterizándola en su máximo grado de frescura y preservando su textura cremosa y sabor natural de granja. Su sabor es muy diferente al resto de natas que puedes encontrar en el supermercado -la mayoría están sometidas al proceso de ultrapasterización (UHT)- y debido a las altas temperaturas a las que se le somete, su sabor y textura son diferentes.